La historia de Mina Clavero se puede reconstruir a partir de relatos, estudios de las huellas plasmadas en el espacio urbano con el paso de los años y sobre todo por medio de su gente.

No hay datos precisos respecto de la fundación de Mina Clavero pero, según testimonios y documentos recogidos, pudo establecerse que poco tiempo después de la fundación de la ciudad de Córdoba -en el año 1573- el capitán Hernán Mejías Miraval tuvo a cargo una expedición hacia lo que hoy es el Valle de Traslasierra, con el propósito de realizar un relevamiento de poblaciones y riquezas, especialmente mineras.

En esa época la zona estaba habitada por los Comechingones, los primeros habitantes de Traslasierra que se establecieron en poblaciones. La autoridad de cada parcela era el cacique, Milac Navira fue quien presidía del clan que habitó las tierras sobre las que hoy se ubica Mina Clavero, cuyos primeros asentamientos se encontraban en la zona que hoy se reconoce como “el Bajo” de Mina Clavero, actual barrio Villa Luján.
Con los primeros expedicionarios viajaba el minero español Hernando Romero, quien fue el encargado de tomar las muestras de los minerales de la zona. Sus investigaciones fueron decisivas para que en 1898 se iniciaran las explotaciones de algunos yacimientos en el territorio de los Ticas, en el departamento de Minas –al norte de Mina Clavero– contribuyendo de este modo al desarrollo de la región.

En la última década del siglo XIX, y con la fundación de la Villa del Tránsito (actualmente Villa Cura Brochero), la población comenzó a crecer. Por ese entonces, las noticias que hablaban acerca de la bondad del clima serrano y del poder curativo de las aguas del Río Mina Clavero, despertaron el interés de los primeros turistas.
Alentados el párroco de Villa del Tránsito, José Gabriel Brochero, Doña Anastasia Favre de Merlo, junto a su esposo Manuel Merlo instalan el primer hotel y casa de comidas del paraje: el viejo Hotel Merlo. Por esta iniciativa y por el notable impulso que su trabajo le dio a la actividad turística, se considera a Doña Anastasia como la fundadora espiritual de la localidad. En este sentido, y como homenaje a su persona, se instituyó la fecha de su fallecimiento (el 11 de octubre) como el Día de Mina Clavero.
La villa fue progresando y organizando sus actividades comunitarias, así el 1 de mayo de 1928 se crea la Municipalidad y ese mismo año, a través de una elección indirecta, el Sr. José María Oviedo Allende se convierte en su primer Intendente. Lo suceden dos intendentes comisionados, hasta que en 1932 asume el primer Intendente electo por la voluntad popular: el Sr. Daniel Vila.

La paulatina construcción de hoteles, hospedajes, hosterías, la inversión en infraestructura turística y la concreción de distintas obras públicas (como el Camino de la Altas Cumbres, redes de agua potable, asfaltado de calles, urbanización y embellecimiento de espacios), sumado a la popularidad que Mina Clavero fue adquiriendo como destino turístico fueron los factores determinantes para el crecimiento y desarrollo de la localidad.
PANAHOLVA Y MILAC NAVIRA
La explicación popular acerca del origen de los ríos de Mina Clavero es trasmitida por los lugareños a sus descendientes a través del relato de una leyenda romántica, una historia de amor en la son protagonistas los primeros habitantes de Traslasierra.

La princesa Panaholva estaba comprometida con el hijo del inca Viracocha, pero ella amaba desesperadamente a Milac Navira. Juntos deciden escapar de Cuzco para salvaguardar su amor.

Emprenden la huida por separado, con el plan de reencontrarse más adelante en un lugar seguro. Pero, traicionados por quien creían su amigo, ambos quedan sumidos en la tristeza de creer muerto a su ser amado.

Cuando faltaba poco para llegar al sitio acordado para el encuentro, la noticia de la muerte de Milac Navira llega a oídos de Panaholva, que rompe a llorar desconsoladamente. Las lágrimas incontenibles comienzan a surcar la tierra hasta dar origen al cauce de un nuevo río que hoy lleva su nombre; sus aguas tienen la tibieza de un amor que nunca se apagó.

Igual suerte corre Milac Navira, quien al enterarse de la muerte de Panaholva no puede contener el llanto. Las lágrimas brotan de sus ojos con tal intensidad que al caer forman una cascada que da origen al río Mina Clavero, cuyas aguas bondadosas tienen el don de curar todos los males.

Guiados por la fuerza de este amor tan prohibido como inevitable ambos cauces se funden en el sitio exacto donde los enamorados habían decidido encontrarse. De la confluencia de ambos ríos nace el río Los Sauces, símbolo de la unión eterna de las almas de dos enamorados que lucharon hasta el final por mantener encendida la llama de su amor.

Fuente:Horacio Gutierrez Soto "El Inca Hoguso" en el Libro; La divina Epopeya o José de America, edición 1964.

Nuestra Gente

Personajes que han hecho historia

El beato José Gabriel del Rosario Brochero fue un presbítero de la provincia de Córdoba, llamado popularmente el cura gaucho por su dedicación y entrega al recorrer los caminos del Valle a lomo de mula difundiendo la palabra de Dios y construyendo nexos entre todos los pueblos de Traslasierra.

El 4 de noviembre de 1866 se ordenó sacerdote después de estudiar en la facultad de filosofía en la Universidad de Córdoba. Primero desempeñó su ministerio sacerdotal en la catedral de Córdoba y fue prefecto de estudios del colegio seminario Nuestra Señora de Loreto. En 1867, Brochero ya se destacaba en la asistencia de los enfermos y moribundos de la epidemia de cólera que azotó a la ciudad de Córdoba.

El 19 de noviembre de 1869 fue elegido vicario del departamento San Alberto, conocido hoy como el valle de Traslasierra, con sede en la localidad de Villa del Tránsito que a partir de 1916 llevaría su nombre. El 24 de diciembre de 1869 partió de la ciudad de Córdoba para hacerse cargo del curato. Allí, asumió como propias las necesidades de la gente transerrana. Con sus manos construyó iglesias y capillas, levantó escuelas y abrió caminos entre las montañas, animando a los pobladores a acompañarlo. Entre sus obras más importantes podemos destacar la casa de ejercicios espirituales junto con el colegio de niñas, el primer camino de altas cumbres, uniendo la ciudad de Córdoba con el Valle y fue uno de los principales impulsores de la actividad turística en la Zona.

En su vejez el padre Brochero enfermó de lepra durante una epidemia, como resultado de convivir con enfermos que padecían esa enfermedad, e incluso compartiendo mate con ellos. Por esa razón quedó sordo y ciego antes de morir, en 1914.

El proceso de canonización se inició en la década de 1960. Brochero fue declarado venerable por el papa Juan Pablo II en 2004, y beatificado en una ceremonia presidida por el cardenal Angelo Amato en Villa Cura Brochero el 14 de septiembre de 2013 luego de que se le adjudican dos milagros comprobados por la junta médica del Vaticano durante el pontificado del papa Francisco. El 16 de octubre de 2016 fue canonizado, convirtiéndose en el primer Santo nacido y muerto en Argentina.

CONOCÉ MÁS
Anastasia Favre de Merlo es considerada por los minaclaverenses la fundadora 'espiritual' de la localidad, ya que fue una de las pioneras de la actividad turística en el Valle de Traslasierra.

Anastasia Favre nació en Gualeguaychú, provincia de Entre Ríos, el 26 de Agosto de 1859. Sus padres fueron Don Juan María Favre y Doña María Francisca Conte. En 1862 la familia se estableció en Río Cuarto y años después se mudó a Villa Mercedes (San Luis). En 1875 los Favre deciden nuevamente cambiar de estancia, de esta manera se radican en Villa del Tránsito (hoy Villa Cura Brochero).

En Villa del Tránsito Anastasia queda huérfana y al cuidado del Cura José Gabriel Brochero. Por iniciativa del Cura Anastasia continúa sus estudios en el Colegio de Niñas. Años más tarde, el sacerdote aconseja a la joven el casamiento con su colaborador Don Manuel Merlo, incentivándolos luego a que una vez concretada la unión ambos se instalen en un paraje cercano a la Villa, denominado Mina Clavero. De esta manera, Manuel y Anastasia abrieron una casa de comidas y un hospedaje (Hotel Merlo) perfilando de esta manera el futuro turístico de la zona.

Los comienzos fueron duros y sacrificados, pero con el correr del tiempo la cantidad de visitantes fue creciendo, todos venían atraídos por la tranquilidad del paraje, por la bondad de las aguas del río Mina Clavero, y por la hospitalidad de los dueños del hotel. En 1889 el hotel llegó a recibir a más de cien personas que provenían de distintas provincias.

Doña Anastasia falleció el 11 de octubre de 1946. A partir de allí, vecinos, amigos y familiares conformaron una comisión que pugna por perpetuar la memoria y el reconocimiento a quien consideran una visionaria y pionera de la actividad turística en Mina Clavero. De este modo, el 4 de junio de 1952, se inaugura en el ingreso a la localidad una Plazoleta que lleva el nombre de quien para ese entonces era considerada la fundadora espiritual de la villa serrana. En 1966 la comisión propone declarar oficialmente el 11 de octubre (aniversario de la muerte de Doña Anastasia) como el Día de Mina Clavero a modo de tributo a quien fuera la propietaria de la primera Casa de Huéspedes de Mina Clavero y supiera descubrir las potencialidades que la villa atesoraba para el desarrollo de la actividad turística.
9 de agosto de 1951 - 10 de marzo de 2001

Jorge Recalde, el Cóndor de Traslasierra, el vecino más famoso de Mina Clavero y el embajador indiscutido de Traslasierra.

Comenzó su carrera en Mina Clavero, en estas sierras y caminos que conocía de memoria. Circuitos de montaña que después transitaría en competencia sin las indicaciones de ningún navegante (por pedido expreso suyo). No hizo falta que Recalde triunfara en el mundo para que minaclaverenses y transerranos reconocieran su talento. Al contrario fueron sus familiares y amigos, y también sus conocidos, quienes incentivaron su carrera automovilística desde los primeros tiempos.

Gracias a este apoyo el Cóndor de Traslasierra empezó a correr sin jamás pasar inadvertido. Su primera victoria fue en 1971, en el Gran Premio de la Montaña.

A nivel nacional, el triunfo le llegaría en 1972, en el Desafío de los Valientes: una carrera en la que superó a los mejores volantes argentinos de la época.

Pese a los éxitos que Recalde cosechó en las distintas competencias automovilísticas en las que participó, la preferencia del Cóndor, como la de todos los cordobeses fierreros, siempre fue el rally, una especialidad que esta provincia se enorgullece de tener entre las piedras de sus montañas. Jorge se llevó consigo el privilegio de ser el único americano que venció en la general de una prueba de Rally Mundial.

Todavía hoy resuena el eco de los veinticinco mil cordobeses que ovacionaron en el Chateau Carreras su única victoria internacional, en el año 1988, con el Lancia Delta con el que derrotó a su compañero de equipo Miki Biasion. Recalde fue calificado por los grupos de alta competición como un excelente tester, ocupando el vigésimo lugar de entre 100 pilotos. A Jorge le sobran títulos para ser considerado uno de los más grandes del automovilismo. Y a Mina Clavero le sobran motivos para considerarlo su hijo predilecto. El IX Rally Villa Dolores, primera fecha del campeonato argentino de la especialidad, fue la competencia en la que Jorge dejó definitivamente su vida.

El 9 de marzo de 2001 Jorge fue el primero en dejar la rampa en la largada simbólica del Rally Villa Dolores. Estrena un Ford Escort que acababa de recibir de Italia y no había tenido tiempo suficiente de probar.

En el cuarto tramo de velocidad el embrague empezó a fallar y el correr de los kilómetros vio agravarse esta dificultad, a punto tal que en el mismo tramo el Ford Escort se detuvo en dos oportunidades. Este desperfecto continuó a lo largo de la etapa. En el Hipódromo, mientras disputaba el último tramo de velocidad, el auto se paró en tres ocasiones. En la última parada su navegante debió empujar la unidad por espacio de 300 metros hasta el arribo definitivo.

Logró terminar la primera etapa con muchísimas dificultades y, a las 17:30 de esa sofocante jornada (38º C aproximadamente) buscaba refugio en el camión trailler de su equipo.

Nunca llegó al motor home. Se desvaneció antes y las atenciones médicas no alcanzaron para reanimarlo. A las 18:15, el Director del Hospital Regional de Villa Dolores emitía un comunicado anunciando el deceso definitivo del Cóndor.

El 4 de mayo de 2005, el Congreso de la Nación sancionó la Ley Nacional 26.030 que declara oficialmente a Mina Clavero como la Capital Nacional del Rally e instituyó el 10 de marzo -fecha del aniversario de la muerte de Recalde- como Día Nacional del Rally.

La idea de reclamar para Mina Clavero tal nominación surgió de un grupo de vecinos y amigos de Jorge Recalde. Ellos consideraron que era el mejor modo de rendir un tributo al "Cóndor de Traslasierra" y de reconocer al hombre que con su trayectoria y con su vida dio testimonio de generosidad, compromiso y amistad.

El pueblo de Mina Clavero hizo suyo este anhelo y la iniciativa se presentó ante el Concejo Deliberante de la localidad. Se aprobó en el Concejo y fue llevado ante la Legislatura provincial. La adhesión fue casi unánime lo mismo ocurrió en la Cámara de Diputados del Congreso de la Nación.

La decisión del Senado de la Nación fue contundente, no hubo oposición. Mina Clavero es la capital nacional de la especialidad porque es sinónimo de Rally por muchas razones: es la tierra que vio nacer a Jorge Recalde, el campeón, el hombre que doblegó bajo las ruedas de su auto todos los caminos, que conoció como nadie la geografía de las sierras grandes. Uno de los propulsores del rally en la provincia de Córdoba y el embajador indiscutido de Traslasierra; además, fue y sigue siendo cuna de pilotos que dejaron su huella en el historial de los campeonatos de rally y escenarios de múltiples emociones que se despliegan cuando los motores rugen y la adrenalina se mezcla con el polvo que levantan las ruedas al rasguñar el camino